Sistema Nervioso

Nuestro sistema nervioso central se compone del cerebro y médula espinal. Éstos controlan y coordinan el funcionamiento de todos los órganos, glándulas y tejidos del cuerpo humano. Si pensamos en el cerebro como nuestro ordenador central, el sistema nervioso es una red de comunicación que transporta los mensajes del cerebro a cada una de las partes de nuestro cuerpo a través de la médula espinal. La médula espinal recorre nuestra espalda desde la base del cerebro a través de la columna vertebral, que hace función de carcasa protectora. De la médula a su vez salen millones de ramificaciones que pasan entre las vértebras y recorren nuestro cuerpo llegando a cada órgano, glándula y tejido.

Cuando la columna, que protege la delicada médula espinal, no está sana, no puede realizar bien su función de protección. Si dos o más vértebras están desalineadas, las ramificaciones nerviosas que pasan a través de ellas se ven comprometidas y se interrumpe el flujo de información entre el cerebro y el cuerpo. Es lo que llamamos Subluxación Vertebral. Esta situación puede no darnos ningún síntoma durante meses o incluso años. Sin embargo, el proceso degenerativo comienza inevitablemente si no se corrige esa subluxación. Los síntomas, como el dolor y la falta de movilidad, es la forma que tiene nuestro cuerpo de informarnos de que algo no funciona bien. Dependiendo de qué vértebras estén desalineadas, los síntomas serán diferentes.

¿Cuál es la misión del Quiropráctico? corregir la subluxación; volver a colocar las vértebras en su posición correcta y devolver al sistema nervioso su buen funcionamiento y así, devolver al cuerpo su capacidad innata de recuperación. Un Sistema Nervioso sano conlleva a una salud óptima.